Homenaje a las y los trabajadores bancarios detenidos desaparecidos a 45 años del golpe cívico militar
En nuestra sede nacional, desde 2014, al entrar nos encontramos con un mural que recuerda a las bancarias y bancarios víctimas de los golpes de estado y las dictaduras en el período 1955-1982. Es abrumadora –188 compañeras y compañeros– la cantidad de víctimas de la represión con que se instauró la Dictadura Cívico Militar en 1976.
Por eso año tras año nos reiteramos, en un ejercicio imprescindible de memoria. El 24 de marzo de 1976, a sólo 6 meses de las elecciones previstas para elegir un nuevo gobierno constitucional, tuvo lugar el golpe cívico militar más siniestro de nuestra historia. Los hechos demuestran que sus objetivos fueron económicos en favor de los más ricos y, sobre todo, del poder financiero, el mismo que hoy nos oprime, a pesar de las declamaciones, bajo el paraguas del Fondo Monetario Internacional.
Hubo, entonces, un Dictador militar: Rafael Videla y un Co-Dictador empresario: José A. Martínez de Hoz, Ministro de Economía. La inmensa mayoría de los jueces les fue funcional, se disolvió el Congreso de la Nación, se impuso una intervención militar a la Asociación Bancaria, junto a los principales sindicatos y la CGT. Otro interventor militar fue designado en nuestra obra social, Servicios Sociales Bancarios, encauzándola hacia erogaciones que comprometieron su viabilidad.
La represión fue brutal. Entre decenas de miles de víctimas, están nuestros detenidos desaparecidos. Fueron presos dirigentes y activistas. Otros debieron exiliarse. Despidieron a cientos de delegados y militantes.
Hubo atropellos en los bancos, comenzando por el cambio compulsivo del horario de trabajo para ajustarlo al funcionamiento del mercado mundial, siguiendo con la derogación de la ley de estabilidad del trabajador bancario y la suspensión, el 2 de abril de 1981, de nuestro Convenio Colectivo de Trabajo.
Entonces comenzó el proceso de financiarización de nuestra economía, desplazando al eje productivo fundado en el trabajo de nuestro Pueblo. Un esquema de apertura económica a costa de la industria y el trabajo nacional, orientado hacia la valorización especulativa del capital, funcional al capital financiero, favorable al sector agro-exportador, a los grandes grupos empresarios y a una distribución regresiva del ingreso en perjuicio de los trabajadores.
No hemos salido de él. Ese esquema se reiteró en el gobierno (2015-2019) de la Alianza Cambiemos presidida por el empresario Mauricio Macri, que, una vez más, volvió a imponer el ciclo perverso del esquema de desregulación y endeudamiento inaugurado por la Dictadura, condicionando a todos los gobiernos hasta el día de hoy. Dejó un desastre económico y social. En ese marco no ha sido fácil sobrellevar el fenomenal impacto de la pandemia Covid-19.
Pero, aun así, no se ha abandonado la lógica de esa financiarización que nos sigue estrangulando. Esa política, neoliberal, en lo que hace a la desregulación de la actividad financiera, se ejecutó y se sigue ejecutando en el marco de la Ley 21526 de Entidades Financieras impuesta el 2 de abril de 1977. Seguimos pagando las consecuencias.
Habilitó la usura, desvirtuó el carácter de servicio público que debe tener el sistema financiero, cuyos servicios no llegan a todas y todos los argentinos. Esa lógica, es inevitable, sigue generando quebrantos y ajustes que no han terminado. La sufrimos los trabajadores bancarios, castigados por decenas de miles de despidos, directos o encubiertos en los retiros no tan voluntarios, como hoy sucede. Inevitable sí para un sistema financiero que, absurdamente, nunca se correspondió ni se corresponde, aun con la masiva incorporación de tecnología, con la dimensión y necesidades de la economía real.
Norma de la Dictadura, la sobrevive.
Por estas razones, por nuestra memoria, en este 24 de marzo, nuevamente, NOS UNIMOS A QUIENES
● Quieren la verdad y exigen justicia pues hay crímenes aún impunes.
● Reclaman, con nosotros, la derogación de la Ley de Entidades Financieras de la Dictadura y la sanción de una nueva ley de servicios financieros, que garantice su condición de servicio público y dimensión necesaria.
● Sostienen:
NUNCA MÁS gobiernos como los Martínez de Hoz, los Macri, los que quieren un país para pocos en beneficio de los muy ricos, un país endeudado, dependiente de decisiones que toman las grandes corporaciones de la usura.
NUNCA MÁS Dictaduras Militares o Financieras.
NUNCA MÁS endeudamiento para la fuga de capitales, la financiación de la destrucción de nuestro entramado productivo, que nos condena a la indefensión ante cada catástrofe de la realidad.
NUNCA MÁS el CRIMEN, de lesa humanidad, de trabajadoras y trabajadores sin salario, familias sin destino, niñas, niños, ancianos con hambre. Están entre nosotros: la niña M nos lo ha vuelto a recordar brutalmente en estos días.
NO QUEPA DUDA, EN LAS LUCHAS POR ESTOS OBJETIVOS, ESTÁN CON NOSOTROS y VIVEN NUESTRAS COMPAÑERAS y COMPAÑEROS DETENIDOS DESAPARECIDOS.
Carlos Irrera, Analía Lungo, Carlos Cisneros, Patricia Rinaldi, Pablo Regnier, Victoria Capoccetti, Walter Rey, Mariel Iglesias, Isabel Fernández, Gustavo Díaz, Enrique Ramírez, Cristian Stratico, Natalia Roino, José Giorgetti, Juan Pallo, Matías Layús, Gabriel Dipierri, Carlos Ferrari, Rosa Sorsaburu, Claudia Ormachea, Francisco Muratore, Claudio Bustelo